Lo de usar una pantalla inalámbrica (screencast) está muy bien, pero hay tantas y tantas opciones que al final uno acaba confundido.
Analicemos el panorama, y luego os cuento mis impresiones sobre EZCast, que es la opción que he escogido yo.
[Actualización: Al final he tenido que comprar un Chromecast por lo mal que funcionaba EZCast.]