Para los usuarios de GNOME 3, grabar la pantalla es tan sencillo como pulsar
Ctrl+Mayús+Alt+R
para empezar, y otra vez lo mismo para parar.
Pero, ¿y si tengo varios monitores y solo quiero grabar uno? ¿O si quiero añadir una locución? ¿Y si solo quiero grabar una ventana? ¿O poner mi cara grabada desde la webcam?
Como recordaréis, hace un tiempo estuve alabando las ventajas de EZCast sobre otras alternativas de la competencia.
Pues bien, ni un año después he tenido que acabar comprándome un Chromecast.
¿Alguna vez has necesitado hacer una grabación de tu escritorio? ¿Y publicarla en Gif, por ejemplo para subirla a GitHub?
Lo de usar una pantalla inalámbrica (screencast) está muy bien, pero hay tantas y tantas opciones que al final uno acaba confundido.
Analicemos el panorama, y luego os cuento mis impresiones sobre EZCast, que es la opción que he escogido yo.
[Actualización: Al final he tenido que comprar un Chromecast por lo mal que funcionaba EZCast.]
Tienes unos cuantos vídeos en tu ordenador procedentes de diversas fuentes (cámara, móvil, Internet, etc.) con diversos formatos (.mp4, .mov, etc.) y quieres unificarlos en un formato libre (aunque no necesariamente, pero sí es recomendable) que ocupe menos espacio en tu disco duro (más información sobre los formatos de vídeo).
Con interfaz gráfica # yum install v4l2ucp $ v4l2ucp Por terminal $ yum install v4l-utils Ver la lista de controles y las instrucciones de uso de los comandos: $ v4l2-ctl --list-controls $ v4l2-ctl --helpEjemplo de uso: $ v4l2-ctl --set-ctrl illuminator_infrared=1 # Encender la luz $ v4l2-ctl --set-ctrl illuminator_infrared=0 # Apagar la luz Lógicamente, para ello al hacer --list controls nos tiene que haber mostrado la opción illuminator_infrared.
En Somos Libres, uno de los mejores blogs de software libre en español que he encontrado últimamente, ofrecen una comparativa de conversores de videobastante interesante. Recuerdo que Transmaggedon me encantó, pero no lograba recordar cómo se llamaba el programa. Hasta entonces usaba OggConvert, que también va de categoría, pero sólo transforma a formatos libres (ogg, mkv y webm), y a veces necesitamos transormar a otro privativo. Respecto a conversores de audio, me quedo con SoundConverter, que funciona de maravilla y permite transformar montones de archivos a la vez.